Rehabilitacion de Santa María la Blanca, el templo de las tres religiones, en Sevilla
Óscar Gil muestra uno de los muros organizadores de la sinagoga |
"Es la primera vez que se excava en el subsuelo de la iglesia y estamos viendo sitios de paso, puertas y otros elementos. Parece que vamos localizando las reformas que se hicieron en la sinagoga. Se tenían noticias por la documentación existente y libros, pero es la primera vez que aparecen los restos. Es todavía prematuro lanzar alguna hipótesis, pero hay muchos historiadores pendientes de nosotros y de lo que aquí se encuentre", explica Diego Oliva Alonso, arqueólogo que junto a Álvaro Jiménez Sancho se está encargando de los trabajos.
Lo más importante de esta obra es que ha permitido a los profesionales trabajar en zonas interiores de la iglesia que hasta ahora eran inaccesibles. En los muros, gracias a que se han retirado los paños de azulejos para su restauración, se han encontrado arranques de lo que podrían ser arcos mudéjares, columnas o muros; incluso de la puerta de entrada de la primitiva mezquita, que ya vio la luz en su parte exterior durante una intervención anterior realizada por la Archidiócesis en la anexa casa del sacerdote. Tras retirarse la solería y remover el subsuelo para atajar los problemas ocasionados por las humedades, también han descubierto restos de muros y estructuras que delimitan claramente la fisonomía y dimensiones de la mezquita y la sinagoga. Uno de estos muros, situados a los pies del templo y que discurriría en paralelo a la actual puerta de entrada, sería signo de una posible organización dentro del templo judío.
"El subsuelo nos está marcando claramente la mezquita. Yo pensaba que era algo diferente. Y también nos está confirmando los muros de la sinagoga", asegura Óscar Gil Delgado, el arquitecto de la restauración y una persona que lleva muchos años estudiando detenidamente la iglesia de Santa María la Blanca. Sería casi cuadrada, con unas dimensiones aproximadas de 12x12 metros: "Cuando en el año 2001 se hizo una obra en la casa del cura el arquitecto descubrió el arco de la puerta de entrada que estaba encalado. Una construcción anterior a la época mudéjar y que delataba una mezquita. Nosotros ya vimos ahí una posible organización de patio de entrada a la mezquita. Ahora se han descubierto estos paramentos en el interior, gracias a que hemos podido picar en los muros", revela Gil Delgado.
La segunda fase de la restauración de la iglesia se centra en la azulejería, la solería y las humedades del subsuelo. En la imagen se puede ver cómo se está actuando en las naves laterales |
Arco de entrada de la primitiva mezquita que salió a la luz tras las obras llevadas a cabo en la casa del cura |
La actual iglesia barroca es fruto de la gran transformación sufrida en el siglo XVII. La dirección facultativa y el párroco todavía no se han planteado qué harán con los restos que están apareciendo y si quedarán visibles para explicar la historia del templo. "Hay tiempo todavía para abrir ese debate y ver qué es lo que más interesa, si el testimonio mudéjar de la época judía o el barroco. Yo, y es una opinión muy personal, pienso que la impronta barroca de esta iglesia es muy importante como para ocultarla", concluye Gil Delgado.
Juan Parejo, Sevilla: Santa María la Blanca, el templo de las tres religiones, Diario de Sevilla, 18 de agosto de 2012